miércoles, 19 de enero de 2011

Capítulo 14 de Awakened | PC & Kristin Cast

Rephaim
Traducido por Liberi


H
abía estado dando vueltas sobre el edificio de Mayo, temiendo aterrizar y enfrentar a Kalona y Neferet, cuando sintió el llamado de Stevie Rae. Sabía que era ella al instante. Reconoció la sensación de la tierra cuando el poder se levanto del suelo debajo de él y lo abrigo a sí mismo alrededor de las corrientes de aire para encontrarlo.

Ella le llama…

Esto era todo el impulso que Rephaim necesitaba. No importaba cuán enfadada ella estaba con él. No importaba cuánto ella lo odiaba—ella le llamaba. Y si ella le llamaba, él contestaría. En su corazón sabía, que cueste lo que cueste, él siempre trataría de contestar.

Recordó las últimas palabras de Stevie Rae. …Cuando decidas que los asuntos de tu corazón son más para ti como lo son para mí, ven a buscarme de nuevo. Debería ser fácil. Solamente sigue tu corazón…

Rephaim cerró la parte de su mente que le dijo que él no podía estar con ella—no podía preocuparse por ella. Ellos habían estado separados más de una semana. Él había sentido cada día de aquella semana como si hubieran sido una era en sí mismo. ¿Cómo había pensado que podía estar completamente lejos de ella? Su misma sangre gritaba para estar con ella. Incluso enfrentar su ira era mejor que nada. Y él necesitaba verla. Necesitaba encontrar una forma de advertirle sobre Neferet. Y sobre su Padre, también.

“¡No!” él gritó al viento. No podía traicionar a su padre. Pero no puedo traicionar a Stevie Rae, tampoco, pensó desesperadamente. Encontraré un equilibrio. Encontraré un camino. Debo hacerlo. No muy seguro de lo que iba a hacer, Rephaim callo sus pensamientos y se concentro en seguir la cinta de color verde brillante hacia Stevie Rae como si fuera su salvavidas.
Stevie Rae



E
lla lo esperaba concentrada con tal intensidad que Stevie Rae no tenía ningún problema en sentir cuando Rephaim se acercó al Gilcrease. Cuando él se dejo caer con gracia del cielo ella estaba de pie, mirando hacia arriba, mirando hacia él. Hizo el intento de ser totalmente fría. Él era el enemigo. Se suponía que tenía que recordar eso. Pero en el instante en que él aterrizo, sus ojos se encontraron y, sin aliento, él dijo, “Oí tu llamado. He venido.”

Esto fue todo lo que hizo. Solo el sonido de su voz maravillosa, familiar. Stevie Rae se lanzó en sus brazos y enterró su cara en las plumas de su hombro. “¡Oh mi Diosa, te he extrañado tanto!”

“Te he extrañado, también”, dijo él, sosteniéndola fuerte.

Se quedaron así, temblando en los brazos del otro, por lo que le pareció a ella un muy largo tiempo. Stevie Rae bebió el olor de él—esa mezcla increíble de sangre inmortal y mortal que bombeaba por su cuerpo—que los unia en la Imprenta y, por lo tanto, también bombeaba en todas partes de su propio cuerpo.

Y luego, de repente, como si cada uno de ellos recordara inmediatamente que ellos no podían hacer lo que estaban haciendo, Stevie Rae y Rephaim rompieron el abrazo y dieron un paso lejos el uno del otro.

“Así que, uh, ¿Has estado bien?”, le preguntó.

Él asintió. “Lo he estado. ¿Y tú? ¿Estás a salvo? ¿No resultaste herida cuándo Jack fue asesinado hoy?”

“¿Cómo sabías que Jack fue asesinado?” Su voz era afilada.

“Sentí tu tristeza. Vine a la Casa de la Noche para estar seguro de que estabas bien. Ahí fue cuando te vi con tus amigos. Yo—yo oí al muchacho que lloraba por Jack”. Él vaciló sobre las palabras, tratando de escogerlas con cuidado, francamente. “Eso y tu tristeza me dijeron que él estaba muerto”.

“¿Sabes algo sobre su muerte?”

“Tal vez. ¿Qué tipo de muchacho era Jack?”

“Jack era bueno y dulce, y podría haber sido el mejor de todos nosotros. ¿Qué sabes, Rephaim?”

“Sé por qué murió”.

“Dime”.

“Neferet le debía a la Oscuridad una deuda de vida en pago por atrapar el alma inmortal de mi padre. La deuda debía de ser pagada por el sacrificio de alguien que era un inocente, incorruptible por la Oscuridad.”

“Ese fue Jack; ella lo mató. ¡Es frustrante como todo esto se escapa porque parece que Neferet no lo hizo! Ella estaba hablando con el Alto Consejo de la escuela, directamente en frente de mí, cuando el accidente de Jack ocurrió”.

“La Tsi Sgili se lo dio de alimento a la Oscuridad. Ella no tenía por qué haber estado presente. Sólo tuvo que haberlo marcado como su sacrificio y luego dejar sueltos los hilos de Oscuridad para llevar a cabo la matanza real. No era necesario que ella presencie la muerte”.

“¿Cómo demuestro que ella fue la responsable?”

“No puedes. El acto está terminado. Su deuda esta pagada”.

“¡Maldita sea! ¡Estoy tan malditamente furiosa que podría escupir clavos! Neferet sigue saliéndose con la suya de toda esta mierda horrible. Ella sigue ganando. No entiendo por qué. No es justo, Rephaim. Esto no es justo”. Stevie Rae parpadeó con fuerza, obligando a retroceder las lágrimas de frustración.

Por un momento, Rephaim tocó su hombro y ella se permitió inclinarse en su mano, para sentir comodidad por el contacto con él. Entonces él se aparto de ella y dijo, “Toda esta ira. Toda esta frustración y tristeza. La sentí de ti antes esta noche, también, y pensé—”. Él vaciló, obviamente tratando de decidir si debía seguir hablando.

“¿Qué?” ella preguntó suavemente. “¿Qué pensaste?”

Él encontró sus ojos otra vez. “Pensé que era a mí al que odiabas. Yo con quien tú estabas tan enojada. Te oí, también. Le dijiste al Maestro espadachín que la corrompida, irremediable Oscuridad estaba afuera al acecho. Mirabas directamente hacia mí cuando lo dijiste”.

Stevie Rae asintió. “Sí, yo te vi, y sabía que si no decía algo para conseguir que Dragón y Damien estuvieran fuera de allí, ellos iban a verte, también”.

“¿Entonces no hablabas de mí?”

Era el turno de Stevie Rae para vacilar. Ella suspiró. “Yo estaba seriamente enojada y asustada y alterada. Yo no estaba pensando acerca de mis palabras. Solo reaccione porque estaba asustada”. Hizo una pausa otra vez y luego añadió, “No quise decir nada en contra tuya, pero Rephaim, realmente tengo que saber que está pasando con Kalona y Neferet”.

Rephaim se dio la vuelta y camino lentamente hacia el borde de la azotea. Ella lo siguió y se detuvo junto a él mientras contemplaban la noche tranquila.

“Es casi el alba”, dijo Rephaim.

Stevie Rae se encogió de hombros. “Tengo aproximadamente media hora antes de la salida del sol. Sólo me tomará uno diez minutos regresar a la escuela”.

“Deberías marcharte ahora y no correr ningún riesgo. El sol puede causarte mucho daño, aún con mi sangre dentro de ti”.

“Lo sé. Iré muy pronto”. Stevie Rae suspiró. “Así que, no vas a decirme lo que pasa con tu papá, ¿Verdad?”

Él se dio vuelta para mirarla de nuevo. “¿Qué pensarías de mí si supieras que traicioné a mi padre?”

“No es un buen tipo, Rephaim. Él no merece tu protección”.

“Pero él es mi padre”, dijo Rephaim.

Stevie Rae pensó que Rephaim lucia agotado. Ella quiso tomar su mano, decirle que esto estaba bien. Pero ella no podía. ¿Cómo diablos iba esto a estar bien con él de un lado y ella del otro? “No puedo luchar contra esto”, ella finalmente dijo. “Vas a tener que aceptar lo que Kalona es y lo que no eres. Pero tienes que entender que tengo que mantener a mi gente a salvo, y sé que él está trabajando al lado de Neferet, no importa lo que ella diga”.

“¡Mi padre está obligado a ella!” espetó Rephaim.

“¿Qué quieres decir?”

“Él no mató a Zoey, por lo que no cumplió su juramento a Neferet, y ahora la Tsi Sgili tiene el dominio sobre su alma inmortal”.

“¡Oh, genial! Así que Kalona es como un arma cargada que Neferet sostiene”.

Rephaim negó con la cabeza. “Él debería serlo, pero mi padre no sirve a otros bien. Se irrita inquietamente bajo su mando. Creo que la analogía sería más exacta si dijeras que mi Padre se parece a una fallada arma cargada que Neferet sostiene”.

“Vas a tener que ser más específico que eso. Dame un ejemplo—¿qué quieres decir?” Ella trató de esconder el entusiasmo de su voz, pero por el modo en que sus ojos de él se estrecharon hacia ella, Stevie Rae sabía que había fracasado.

“No lo traicionaré”.

“Okay, bien. Ya entendí eso. ¿Pero significa eso que no puedes ayudarme?”

Rephaim la miro silenciosamente por tanto tiempo que ella pensó que él no iba a contestarle, y estaba tratando de formular otra pregunta en su cabeza cuando él finalmente dijo, “Quiero ayudarte, y lo hare mientras esto no signifique traicionar a mi padre”.

“Esto se parece mucho al primer trato que tu y yo hicimos, y no terminó tan mal, ¿Verdad?” preguntó ella, sonriéndole.

“No, no tan mal”.

“Y, en realidad, ¿no estamos todos nosotros básicamente contra Neferet?”

“Yo lo estoy”, dijo él firmemente.

“¿Y tu papá?”

“Él quiere liberarse de su control”.

“Bueno, esto es prácticamente lo mismo que estar de nuestro lado”.

“No puedo estar de tu lado, Stevie Rae. Tienes que recordar eso”.

“¿Entonces lucharías contra mí?” Ella lo miro de frente.

“Yo no puedo hacerte daño”.

“Bueno, entonces—”

“No”, él interrumpió. “No ser capaz de hacerte daño es diferente que luchar por ti”.

“Lucharías por mí. Ya lo haces”.

Rephaim agarró su mano, apretándola como si por el contacto él podría hacerla entender. “Nunca luchare contra mi padre por ti”.

“Rephaim, ¿Recuerdas a ese chico que vimos en la fuente?” Ella cambió el agarre de su mano y entrelazo sus dedos con los suyos.

Él no habló. Sólo asintió.

“¿Sabes que él está dentro de ti, verdad?”

De nuevo, Rephaim asintió, esta vez despacio y vacilantemente.

“Aquel chico dentro de ti es el hijo de tu madre. No de Kalona. No la olvides. Y no olvides a aquel chico y por lo que él lucharía, también. ¿De acuerdo?”

Antes de que Rephaim pudiera contestar, el teléfono de Stevie Rae sonó con Miranda a Lambert  ‘Only Prettier’. Ella dejó caer la mano de Rephaim y busco a tientas en su bolsillo por ello, diciendo “¡Este es el ringtone de Z! Tengo que hablar con ella. No sabe lo de Jack aún”.

Antes de que ella pudiera presionar el botón de respuesta, la mano de Rephaim cogió la suya. “Zoey tiene que volver a Tulsa. Esta es una forma de que podamos luchar contra Neferet. La Tsi Sgili odia a Zoey, y su presencia aquí será una distracción”.

“¿Una distracción de qué?” Stevie Rae preguntó justo antes de golpear el botón de respuesta y hablar rápidamente en el teléfono, diciendo, “Z, espera. Tengo que decirte algo importante pero necesito un segundo”.

La voz de Zoey llegó a través de la línea como si estuviera hablando desde el fondo de un pozo. “No hay problema, pero devuélveme la llamada, ¿Está bien? Estoy seriamente en un itinerario”.

“Lo haré en dos sacudidas de la cola de un gato muerto”, dijo Stevie Rae.

“¿Sabes cuan asqueroso eso suena?”

Stevie Rae sonrió en el teléfono. “Yep y adiós”.

“Quisiste decir asco y adiós. Hablare contigo en un segundo”.

La línea se desconecto y Stevie Rae alzó la vista hacia Rephaim. “Así que explícame sobre Neferet”.

“Mi padre desea descubrir un modo de romper las obligaciones que lo atan a Neferet. Para ello, él necesita una distracción para ella. Su obsesión con Zoey es una distracción excelente, como lo es su deseo usar a los novatos rojos renegados en su guerra con los humanos”.

Las cejas de Stevie Rae subieron. “No hay ninguna guerra entre vampiros y humanos”.

“Si la voluntad de Neferet se hace, la habrá”.

“Bien, bueno, pues tendremos que estar seguros de que no ocurra. Parece que Z realmente tiene que llegar a casa”.

“Ellos quieren usarte, también”, soltó Rephaim.

“¿Huh? ¿Quiénes ellos? ¿Yo? ¿Para qué?”

Rephaim aparto su mirada de ella y habló muy rápidamente. “Neferet y mi Padre. Ellos no creen que hayas elegido el camino de la Diosa. Ellos piensan que podrías ser persuadida para moverte al lado de la Oscuridad”.

“Rephaim, no hay siquiera una diminuta pequeña posibilidad de esto. No soy perfecta. Tengo mis problemas. Pero escogí a Nyx y a la Luz cuando recuperé mi humanidad. Nunca voy a cambiar esa decisión”.

“Nunca he dudado de eso, Stevie Rae, pero ellos no te conocen como yo lo hago”.

“Y Neferet y Kalona nunca pueden averiguar sobre nosotros, tampoco, ¿Verdad?”

“Sería muy malo si lo hicieran”.

“¿Muy malo para ti o para mí?”

“Para nosotros dos”.

Stevie Rae suspiró. “Bien, entonces seré cuidadosa”. Ella tocó su brazo. “Tienes que ser cuidadoso, también.”

Él asintió. “Deberías emprender el viaje de regreso. Llama a Zoey mientras conduces. El alba está muy cerca”.

“Sí, sí, lo sé”, dijo ella, pero ninguno de ellos se movió.

“Y tengo que regresar”, dijo él, como si tratara de convencerse a sí mismo.

“Espera, ¿No te quedas aquí más?”

“No. La tormenta de hielo ha pasado y hay demasiados humanos sobre el terreno ahora”.

“Bueno, ¿Dónde estás?”

“¡Stevie Rae, no puedo decirte eso!”

“Debido a que estás con tu papá, ¿Correcto?” Cuando él no habló siguió. “Hey, no es como si yo no supiera ya que era totalmente b.s.[1] cuando Neferet anunció todo lo del castigo de los cien–azotes-y-destierro-de-Kalona-por-un-siglo.”

“Ella realmente hizo los azotes. Los hilos de la Oscuridad lo cortaron cien veces”.

Stevie Rae se estremeció, recordando cuan horrible solo el toque de uno de aquellos hilos había sido. “Bueno, yo no se lo desearía a nadie”. Ella encontró los ojos de Rephaim. “Pero la parte sobre él siendo desterrado del lado de Neferet durante un siglo es b.s., ¿Verdad?”

Rephaim hizo un rápido, casi imperceptible asentimiento.

“¿Y no me dirás dónde te quedas porque es donde se queda Kalona, también?”

Él dio otro asentimiento leve. Ella suspiró otra vez. “¿Así que si necesito verte tengo que ir a merodear alrededor de algún aterrador edificio antiguo en algún lugar o algo así?”

“¡No! Mantente segura y en lugares públicos. Stevie Rae, si me necesitas ven aquí y llama como lo hiciste esta noche. Prométeme que no saldrás tratando de encontrarme”, dijo él, dándole a su brazo una pequeña sacudida.

“Está bien, está bien. Lo prometo. Pero está cosa de preocupación—por—ti va en ambos sentidos. Rephaim, sé que él es tu papá, pero él está también en algunas cosas malas. Solo no quiero que te lleve con él. Así que se cuidadoso, ¿Está bien?”

“Seré cuidadoso”, dijo él. “Stevie Rae, esta noche vi algunos novatos rojos renegados. Ellos están haciendo su guarida en el instituto Will Rogers. Dallas los ha unido”.

“Rephaim, por favor no le digas a Kalona y Neferet”.

“¿Por qué, para que puedas mostrarles la bondad y la humanidad y ellos puedan tener otra oportunidad de matarte?” le gritó a ella.

“¡No! Solo porque trate de ser agradable no significa que yo sea estúpida odébil. ¿Jeeze, qué pasa contigo y Afrodita? Yo no iría a hablar con ellos a solas. Infiernos, Rephaim, yo no trataría de razonar con ellos en absoluto. Ya probé que no funciona. De cualquier forma lo que haría sería ir con Lenobia y Dragón y Z, por lo menos. Básicamente, solo no quiero que se le unan a Neferet, por lo que no quiero que sepa de ellos”.

“Es demasiado tarde. Fue Neferet quien me puso sobre su rastro esta noche. Stevie Rae, te pido que estés lejos de los renegados rojos. Ellos no significan nada más que el destino para ti”.

“Seré cuidadosa. Ya te lo dije. Pero soy una Alta Sacerdotisa y los novatos rojos son mi responsabilidad.”

“Esos que han escogido la Oscuridad no son tu responsabilidad. Y Dallas no es más un novato. Él no es tu responsabilidad”.

La sonrisa de Stevie Rae estaba torcida. “¿Estas celoso de Dallas?”

“No seas ridícula. Simplemente no quiero verte herida de nuevo. Deja de cambiar el tema”.

“Hey, Dallas no es más mi novio”, dijo ella.

“Sé eso”.

“¿Estás seguro?”

“Sí. Desde luego.” Él se sacudió a sí mismo y desplego sus alas. Stevie Rae contuvo su aliento mientras lo observaba. “Llama a tu Zoey mientras conduces de regreso a la seguridad de la escuela. Te veré pronto de nuevo”.

“Mantente a salvo, ¿Está bien?”

Se volvió hacia ella y ahueco su cara entre sus manos. Stevie Rae cerró sus ojos y se quedo allí, tomando la comodidad y la fuerza de su toque. Demasiado pronto termino. Demasiado pronto él se fue. Ella abrió sus ojos para ver sus alas majestuosas golpeando contra el aire de la noche y levantándolo más alto, más alto, hasta que desapareciera en los apenas perceptibles rayos del cielo Oriental.

Rephaim tenía razón. Estaba demasiado cerca del amanecer para su comodidad. Stevie Rae pulso redial mientras se apresuraba a través de la mansión desierta y de regreso al escarabajo.

“Hey, Z. Soy yo. Tengo algunas cosas difíciles que decirte, así que prepárate…”.

1 comentario:

Anónimo dijo...

awww... adoro a Rephaim! Aún no entiendo que hayan tan pocos fics sobre estos dos, son taaaaan tiernos... Por cierto, b.s. qué significa? ¿"bullshit"? Podría ser, no? Los personajes de esta serie son muy raritos en lo que se refiere a palabrotas.